Diego Otero Santiago comenzó su carrera como atleta casi sin querer. Su primera corrida fue en el Centro María de los Ángeles, donde su familia ha ofrecido de su tiempo y colaboración durante varios años. Cuando cursaba el 6to grado, completó su primer 5K con excelentes resultados y su madre, María Santiago Suazo, lo exhortó a que comenzara a entrenar, pero él no estaba tan convencido. No es hasta que años más tarde, cuando corrió su primer 10K sin ningún tipo de preparación y ganó, que decide darle una oportunidad a las carreras de larga distancia. Desde ese momento y hasta el presente, Diego ha dedicado muchísimo de su tiempo y esfuerzo a entrenar para convertirse en atleta. Este gran corredor se destaca en los 5,000 metros, 10,000 metros y el medio maratón.
Este reto consiste en correr a través de los pueblos costeros de la Isla, del 13 al 28 de diciembre.
El talento y compromiso de este joven de Cupey, le han permitido representar a la Universidad de Puerto Rico de Río Piedras, en donde estudia un Bachillerato en Biología. Además de continuar siendo un gran fondista, Diego aspira a ingresar al Recinto de Ciencias Médicas para convertirse en doctor. Justo culminó su participación en la temporada LAI, y sin tomar mucho tiempo de descanso, ya se encuentra entrenando para su próximo reto: Vuelta con Sentido.
Este reto consiste en correr a través de los pueblos costeros de la Isla, del 13 al 28 de diciembre, comenzando en Toa Baja y terminando en Carolina. Todos los días, Diego saldrá a las 6:00 a.m. hacia su destino y estará corriendo un aproximado de 13 millas, hasta completar un total de 215. Su esfuerzo va dirigido a recaudar fondos para el Centro María de los Ángeles en donde todo comenzó; el centro es una organización sin fines de lucros que ofrece servicios y oportunidades para niños y jóvenes con diversidad funcional. “No buscamos tiempo, simplemente completar la distancia”, comentó Diego.
Sin lugar a duda, correr 215 millas no es tarea fácil. Conlleva sacrificio, esfuerzo, muchas horas de entrenamiento y una mentalidad de campeón. La preparación para este reto comienza con entrenamientos que van desde un mínimo de diez millas diarias, pero el trabajo no se queda ahí. Junto a Diego se encuentra un dedicado equipo que se ha encargado de diseñar la logística del reto acompañándolo durante el proceso. Son muchos detalles los que se deben considerar al momento de realizar una corrida como esta y su equipo tiene todas las bases cubiertas: expertos en terapia física, nutrición, suplementos vitamínicos y, lo más importante, el apoyo al momento de correr.
“Los buenos nos tenemos que ayudar, porque sino los malos se quedan con el kiosko”
Como muchos, nos preguntamos ¿Qué motivó a Diego a completar este reto? “El deporte es algo muy personal. Sacas el fruto del esfuerzo que tú inviertas. Al vivir una vida tratando de hacer el bien y ayudar a los demás, me dije: ¿Cómo yo puedo poner esto al servicio de otros?”, expresó. Con esta mentalidad e inspirado por el ultra nadador de aguas abiertas, Joel Matos, a quien también reconocimos y reseñamos en Revista Cupey, Diego decide que ofrecer su tiempo como voluntario en el Centro María de los Ángeles no era suficiente y que debía ayudar de alguna otra manera y con mayor impacto. “Es una idea un poco loca, pero posible”, dijo entre risas. Todos los fondos recaudados serán entregados a la organización para ayudar a que continúen ofreciendo apoyo emocional y fisiológico a niños y jóvenes con diversidad funcional.
“Estamos en tiempos difíciles, pero si nos ayudamos hacemos los días más fáciles. Gracias a todo el mundo que me ha apoyado en este proceso. Esto empezó como una idea loca y se convirtió en un acto de bien. Gracias a mi familia que siempre está detrás mío, en el proyecto y en todo lo que me propongo”, añadió.
Exhortamos a todos a seguir de cerca la iniciativa de Vuelta con Sentido, a través de su página en Facebook y a enviarle buenas vibras a Diego durante su recorrido. “Los buenos nos tenemos que ayudar, porque sino los malos se quedan con el kiosko”, insistió.
Si eres uno de esos buenos que menciona Diego y deseas apoyar esta Navidad al Centro María de los Ángeles, puedes enviar tu aportación a través de ATH Móvil al 787.379.3569 o realizar un depósito en la cuenta #203-686911 del Banco Popular y compartir el esfuerzo para regar la voz y que más personas colaboren con este esfuerzo.
Arianys Casiano Ortiz
Arianys Casiano Ortiz estudió con beca de honor en la Universidad del Sagrado Corazón cursando un Bachillerato en Artes de las Comunicaciones. Participó en el programa de internado de Ad-diction, donde ahora labora, y colabora con la Revista Cupey.