Valeria Laguna Acevedo es una jovencita de Cupey y estudiante de 4to grado del colegio St. Mary’s School, que participó en el Certamen Literario de Campechada, creado por el Instituto de Cultura Puertorriqueña, que en la pasada edición se dedicó a Don Ricardo Alegría. Con su cuento “Carolina y Ricardo, un viaje por el tiempo”, llevó a los lectores por un recorrido a través de estampas que destacan la cultura puertorriqueña y algunos personajes ilustres. Su cuento obtuvo el premio de Tercer Lugar en la categoría de cuento para los niveles de primero a quinto grado. Felicitamos a Valeria en este premio tan especial. Nos entusiasma mucho conocer y compartir logros de jóvenes de nuestra comunidad, amantes de nuestra historia y cultura. Aquí les compartimos su cuento y esperamos que disfruten del viaje. Le deseamos a Valeria muchísimo éxito y que continúe desarrollando su interés y destrezas para la escritura.
Carolina y Ricardo, un viaje por el tiempo
Había una vez y don son tres, una niña llamada Carolina. Carolina estaba en tercer grado y vivía con sus dos padres en Florida, Estados Unidos. Carolina había nacido en Puerto Rico, pero de pequeña se fue para Florida y sus padres no le contaban mucho de Puerto Rico. La niña deseaba saber más sobre la isla en donde había nacido. Una noche cuando se fue a dormir, cerró los ojos, y cuando los abrió, vio una figura extraña. La niña dijo: “¿Dónde estoy? ¿Quién eres tú?” Don Ricardo dijo: “Tranquila, mi nombre es Ricardo Alegría”. Carolina estaba confundida y dijo: “Usted es de los pocos puertorriqueños que conozco. Te estudié en mi clase de Español”.
“Pues hoy viajaremos en mi cápsula del tiempo, te llevaré a ver algunas cosas del pasado y conocerás personajes muy importantes en la historia de Puerto Rico”- dijo Ricardo Alegría. “¡Por fin voy a saber cosas de Puerto Rico! Señor Ricardo, estoy muy emocionada, ¿cuándo vamos a empezar?”- dijo Carolina “¡Qué bueno que preguntaste porque ahora nos vamos! ¡Así que abróchate el cinturón, porque vamos a despegar!”- dijo Don Ricardo.
“Esta es nuestra primera parada. Aquí conocerás a los taínos. Yo estudié mucho esta cultura y aprendí muchas cosas. ¿Ves ese juego? Se llama batú y se juega en el batey. Aquí compiten para ganar premios del cacique”, decía Don Ricardo. “¿Qué es un batey?” y “¿Qué es un cacique?”, preguntó Caro. “Un cacique es el jefe de los taínos y un batey es un espacio donde juegan los juegos como el que estamos viendo ahora. ¿Sabías que los taínos nombraron algunos nombres de los pueblos de P.R. como Utuado y Jayuya? También hay cosas que usaban los taínos que todavía usamos, como la hamaca y la canoa”- le contestó Don Ricardo. “¿En serio?”- preguntó Caro sorprendida. “Sí, así mismo es. Pero bueno, ya tenemos que irnos a otra época de Puerto Rico, porque ya se nos va a acabar el tiempo. Despídete, Carolina, porque ya nos vamos”. “¡Adiós taínos!”- dijo Caro.
“Caro, ¿conoces a esa joven cosiendo la bandera?”- preguntó Don Ricardo. “No, ¿a caso esa bandera es la de Puerto Rico?”- preguntó Caro. “No, esa bandera es la del Grito de Lares y esa joven es Mariana Bracetti. Ella fue la mujer que cosió la bandera del Grito de Lares.”- dijo Don Ricardo. “¿Qué es el Grito de Lares?”, preguntó la niña. “El Grito de Lares fue muy importante en la historia de P.R., fue un grupo de puertorriqueños que querían lograr la independencia de Puerto Rico del gobierno español.”- le contestó Don Ricardo. “¿Me pudieras hablar más sobre Mariana Bracetti?”- preguntó Carolina. “¡Claro que sí pequeña!”- le dijo Don Ricardo. “A Mariana se le conoció como Brazo de Oro por coser la bandera del Grito de Lares. También fue conocida por su gran valentía y por enseñarles a leer a los esclavos que habían sido liberados. Tenía un gran corazón.”- le contaba Don Ricardo. “Bueno Caro, otra vez tenemos que despedirnos, porque ya es hora de ir a otra época de Puerto Rico”- le dijo Don Ricardo. “¡Adiós Mariana Bracetti”- se despidió Caro. s
“Sr. Ricardo, ¿por qué estamos en un juego de béisbol y por qué esto no se parece a Puerto Rico?”- preguntó Caro. “Así es Caro, no estás en Puerto Rico, estás en Pittsburgh y ese joven que ves allí se llama Roberto Clemente. Nació en Carolina, Puerto Rico”- le dijo Don Ricardo. “Yo no sabía que había un pueblo de Puerto Rico que se llama como yo”- le dice Carolina. “Así es, Caro. Y ahora vas a ver, con tus propios ojos, uno de los momentos más grandiosos de Roberto Clemente, ¡acaba de tirar su hit número 3,000!”- dijo emocionado Don Ricardo. “¿O sea que el famoso jugador de béisbol que yo escuché que tiró 3,000 hits y que tenía el famoso número 21 era de Puerto Rico?”- preguntó emocionada Caro. “¡Así es!”- le contestó Don Ricardo.
“Bueno Carolina, es hora de llevarte devuelta a tu casa, que mañana hay escuela.”- dijo Don Ricardo. Al despedirse, Don Ricardo le dijo: “Carolina, cuando puedas dile a tus padres que te lleven a Puerto Rico para que visites el Centro Ceremonial Indígena, allí vas a aprender más sobre los taínos. También vayan al Instituto de Cultura Puertorriqueña, y a todos los museos, para que conozcas más personajes de la historia de Puerto Rico”. “Ok, se lo voy a decir a mis papás. Gracias, Don Ricardo, por todo lo que me has enseñado”- le dijo Carolina. “Fue un placer conocerte Carolina y esta es tu parada final. Nos vemos pronto.”- se despidió Don Ricardo.
Carolina se despertó con la voz de su madre: “Buenos días, Caro, es hora de ir a la escuela”. Después que Carolina llegó de la escuela, le preguntó a su mamá más sobre Puerto Rico y le pidió ir en verano y pasar unas vacaciones en Puerto Rico, para visitar todos los lugares que le mencionó Don Ricardo.
Fin
Arianys Casiano Ortiz
Arianys Casiano Ortiz estudió con beca de honor en la Universidad del Sagrado Corazón cursando un Bachillerato en Artes de las Comunicaciones. Participó en el programa de internado de Ad-diction, donde ahora labora, y colabora con la Revista Cupey.